ELLA... UNA MUJER

ELLA... UNA MUJER Es su voz la mejor sinfonía, la mirada una tierna caricia, sus manos de trabajos forjadas y su vientre la cuna anhelada. Ella… Sonríe y esconde sus lágrimas, con miguitas de indiferencia, soledad y cansancio añejadas, hace pan de fe y esperanzas. Ella… Nunca se queja, no descansa, basta un detalle, una palabra y su faz cambia, sus pies danzan, olvida el olvido, es bonanza. Ella… La conquistada y esclavizada, que carga a sus hijos en la espalda, los lleva al mercado, va apurada, acaba la venta, no gana nada. Ella… La guerrillera, siguió a la bola, Fue "tras" su hombre y a su lado como una sombra lo acompañaba, la vida por noble causa ofrendaba. Ella… Que enarbola una bandera de igualdad la que estudia, que trabaja y aun así vive silenciada y discriminada, sea ejecutiva, obrera o licenciada, Ella… madre soltera, de penas silentes, cansada. En pleno siglo XXI y muere inopinada, aun maltratada, golpeada, violentada, un día al año, honrada, recordada. Ella… Su brazo en lo alto sigue denodada, con una bella caricia en su mirada, su alma de trabajo rudo forjada, su vientre amoroso la cuna anhelada. Ella… ¡Una mujer...! Luz Elena Sepúlveda Derechos reservados