EREMITAS EN EL AMOR
La encontró una madrugada,
asomando a su ventana,
jugueteaba con sus ansias,
en una aventura de amor,
no había mas compañía,
que sus manos de hada,
convertidas en alas
de libélula enamorada,
de su boca salían sinfonías
de frescura y de misterios,
solo voces de ternura
acompañan el silencio.
en una aventura de amor,
no había mas compañía,
que sus manos de hada,
convertidas en alas
de libélula enamorada,
de su boca salían sinfonías
de frescura y de misterios,
solo voces de ternura
acompañan el silencio.
Nadie imaginaba
lo que estaba sucediendo
como espía del encuentro,
lo que estaba sucediendo
como espía del encuentro,
la luna y su resplandor que
ilumino el desdoblamiento,
ahora son dos eremitas,
disfrazados de amantes,
ilumino el desdoblamiento,
ahora son dos eremitas,
disfrazados de amantes,
de fieles enamorados,
pendulando en los
pendulando en los
limites de la pasión.
La noche complice hechicera,
tiene de invitadas las estrellas,
testigas solemnes, discretas
de la unión de dos almas
La noche complice hechicera,
tiene de invitadas las estrellas,
testigas solemnes, discretas
de la unión de dos almas
eremitas y distantes,
que emprenden un vuelo
unísono al firmamento
en una misma nave de amor.
Autora: Luz Elena Sepúlveda
que emprenden un vuelo
unísono al firmamento
en una misma nave de amor.
Autora: Luz Elena Sepúlveda
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